Los ataúdes de cartón Daisybox están fabricados con cartón corrugado de primera calidad, con tres capas de espesor en los laterales y dos en la base. El diseño ha sido probado independientemente en un laboratorio acreditado por la NATA para soportar un peso mínimo de 240 kg (528 lb). En más de 15 000 ataúdes vendidos, nunca hemos tenido un fallo estructural. Ninguna junta en los laterales ni en la base del ataúd puede romperse bajo carga. Este es el secreto de nuestro diseño patentado.
Los ataúdes Daisybox se transportan a granel a funerarias en Australia, Nueva Zelanda, Filipinas, Sudáfrica y EE. UU. Nuestros sistemas no están preparados para la venta directa al público, por lo que preferimos que encuentre un distribuidor adecuado, como se muestra en nuestro mapa global de distribuidores .
Por supuesto, sí. Al estar hecha de cartón corrugado, una Daisybox se biodegrada de forma respetuosa con el medio ambiente, a diferencia del MDF y el aglomerado con resina, que liberan formaldehído en el suelo. Los organizadores funerarios con conciencia ecológica también incluirán un forro y una almohada de calicó natural para la Daisybox, para garantizar que no se entierren telas sintéticas.
Una cremación directa, también conocida como "funeral sin servicio ni asistencia", consiste en incinerar el cuerpo de una persona poco después de su fallecimiento sin un servicio fúnebre previo con la presencia de familiares o amigos. Las cremaciones directas son la opción funeraria más económica. Los familiares y amigos suelen organizar un servicio conmemorativo después de la cremación directa para rendir homenaje a su persona.
Un servicio conmemorativo puede celebrarse desde una semana hasta un año después del entierro o la cremación. Puede celebrarse en una casa, en un parque, en una iglesia o capilla.